EUROPA
PRESS
15 febrero
2020
Los
hombres altos tienen menos riesgo de demencia, aun con la genética en contra
Los hombres más altos en la edad
adulta, como un indicador de las circunstancias de la vida temprana, pueden
tener un menor riesgo de demencia en la vejez, sugiere un estudio publicado en
la revista 'eLife'.
Encontrar formas de identificar a las personas en riesgo de
demencia es esencial. Puede ayudar a las personas a tomar medidas preventivas o
planificar su cuidado futuro. El estudio, publicado originalmente en 'bioRxiv', indica que la altura de los adultos jóvenes
podría ser un factor de riesgo potencial a considerar.
Estudios anteriores han sugerido que la altura puede ser un
factor de riesgo para la demencia, pero gran parte de esta investigación no
pudo tener en cuenta factores genéticos, ambientales u otros factores de la
vida temprana que pueden estar relacionados tanto con la altura como con la
demencia.
"Queríamos ver si la altura del cuerpo en los hombres
jóvenes está asociada con el diagnóstico de demencia, mientras exploramos si
las puntuaciones de las pruebas de inteligencia, el nivel educativo y los
factores ambientales y genéticos subyacentes compartidos por los hermanos
explican la relación", explica la autora principal, Terese
Sara Hoj Jorgensen,
profesora asistente en la Sección de Medicina Social del Departamento de Salud
Pública de la Universidad de Copenhague (Dinamarca).
Para hacer esto, Jorgensen y sus
colegas analizaron datos de 666.333 hombres daneses nacidos entre 1939 y 1959,
incluidos 70.608 hermanos y 7.388 gemelos, de registros nacionales daneses.
Encontraron un total de 10.599 hombres que desarrollaron demencia más tarde en
la vida.
Su análisis ajustado de este grupo mostró que hubo una
reducción de aproximadamente el 10% en el riesgo de desarrollar demencia por
cada 6 centímetros de altura en individuos por encima de la altura promedio.
Cuando el equipo tuvo en cuenta el papel potencial de la inteligencia o la
educación, la relación no ajustada entre la altura y el riesgo de demencia se
redujo solo ligeramente.
Descubrieron que la relación entre la altura y la demencia
también existía cuando miraban a hermanos con diferentes alturas, lo que
sugiere que la genética y las características familiares por sí solas no explican
por qué los hombres más bajos tenían un mayor riesgo de demencia. Esto también
se confirmó cuando estudiaron datos sobre gemelos, aunque los resultados para
este grupo fueron menos seguros.
"Una fortaleza clave de nuestro estudio es que se
ajustó al papel potencial de la educación y la inteligencia en el riesgo de
demencia de los hombres jóvenes, los cuales pueden acumular reservas cognitivas
y hacer que este grupo sea menos vulnerable a desarrollar demencia",
explica la autora principal Merete Osler, profesora del Centro de Investigación Clínica y
Prevención del Hospital de Bispebjerg y Frederiksberg
y de la Universidad de Copenhague.
La 'reserva cognitiva' se refiere a la capacidad del cerebro
para improvisar y resolver problemas que surgen en la vida cotidiana. Osler dice que adaptarse a la educación y la inteligencia
reduce la probabilidad de que la relación entre la altura y la demencia se
explique realmente por la reserva cognitiva.
"Juntos, nuestros resultados apuntan a una asociación
entre la altura del cuerpo más alto en hombres jóvenes y un menor riesgo de
diagnóstico de demencia más adelante en la vida, que persiste incluso cuando se
ajusta por nivel educativo y puntajes de pruebas de inteligencia, añade Osler. Nuestro análisis de los datos relativos a los
hermanos confirma estos hallazgos, y sugiere que la asociación puede tener
raíces comunes en exposiciones ambientales en la vida temprana que no están
relacionadas con factores familiares compartidos por los hermanos".